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En su conferencia de prensa diaria, Cuomo prometió una reforma «radical» en la que primará la transparencia y el uso de técnicas menos violentas, dos reclamos históricos de la minoría negra y de activistas y organizaciones de derechos civiles.
«El modelo actual de policía no funciona. Es el momento de un modelo nuevo e inteligente», explicó Cuomo, citado por la agencia de noticias EFE.
“Debemos reformar el sistema de justicia penal, que es un fracaso lleno de disparidad racial», agregó el gobernador e insistió en la necesidad de que sea la fiscal general del estado quien ejerza como fiscal especial en los casos de violencia policial, lo que sucedió en Minnesota con el caso de Floyd.
El gobernador espera ver avances esta misma semana en el congreso estatal, donde los demócratas controlan ambas cámaras.
«Cuando hablamos de agenda de justicia hay que abordar el racismo sistémico en nuestra sociedad, y apoyo a los manifestantes en ello”, culminó el gobernador.
Se espera que en los próximos días se aborde la derogación de la sección 50a de la ley de derechos civiles que permite que los policías no tengan que hacer público su historial disciplinario, lo que en muchas ocasiones dificulta conocer si hay un patrón racista en su trabajo.
Los anuncios de Cuomo generaron un rechazo inmediato en el Departamento de Policía de Nueva York.
En una conferencia de prensa poco usual y sin disimular su enojo, el líder del sindicato de la Policía neoyorquina, Mike O’Meara, reclamó: «Paren de tratarnos como animales y criminales y empiecen a tratarnos con algo de respeto…Nuestros legisladores nos abandonaron. La prensa nos ensucia. Es desagradable.»
La critica a los legisladores se debe a que, el lunes pasado, el congreso neoyorquino aprobó finalmente la prohibición del uso de la técnica policial de estrangulamiento durante las detenciones, una medida que también fue tomada por el Consejo Municipal de Minneapolis el viernes pasado, menos de dos semanas después de que Floyd muriera asfixiado por el uso de esa misma táctica.
Cuomo, además, volvió a criticar al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien esta mañana publicó un tuit criticando al hombre de 75 años de Buffalo, Nueva York, quien en medio de una manifestación antirracista fue empujado por dos policías y quedó sangrando en el piso.
«El manifestante de Buffalo empujado por la policía podría ser un provocador Antifa”, tuiteó el presidente republicano en referencia al movimiento antifascista que el 31 de mayo el mandatario amenazó con designarla como organización terrorista.
“Lo he visto y cayó más fuerte de lo que le habían empujado. Estaba apuntando al escáner. ¿Podría ser un montaje?», siguió Trump quien, como de costumbre, no acompañó ninguna evidencia que fundamenten sus afirmaciones.
Cuomo tildó al presidente de «temerario, irresponsable, malo y cruel», aseguró que hizo un comentario «estúpido» totalmente «reprobable» y lo acusó de «echar gasolina al fuego» en un momento de angustia e ira en toda la nación.
«Mostrá algo de decencia, humanidad y justicia. Sos el presidente de Estados Unidos», exclamó Cuomo.
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